Los periodistas de investigación de El Diario de Nuevo Laredo verifican y confirman la veracidad del discurso de los actores políticos. En el caso de ruedas de prensa, informes y debates, se verifica en vivo o a través de las redes sociales institucionales. La noticias e información que se comparten a través de redes sociales, mensajería instantánea o que se recibe mediante denuncias ciudadanas, se verifica y contrasta con diversas fuentes y medios para evitar replicar información falsa.

Procuramos seleccionar frases o declaraciones sostenidas con datos, estadísticas, datos históricos y hechos, no así las opiniones sin sustento. En todo momento se toma en cuenta la relevancia del personaje que emite una declaración, así como su impacto público y la importancia del asunto. Es prioritario ubicar en contexto y para eso se consultan fuentes oficiales, alternativas y originales. Por principio, los hechos y evidencias documentales se privilegian sobre las declaraciones y los dichos, procurando que las opiniones y declaraciones no sean confundidas con hechos.

Los reporteros recurren a fuentes confiables y verifican con otras fuentes los datos que parecen inconsistentes. Si el editor considera que una fuente no tiene credibilidad, se elimina la información de inmediato. Tampoco se omiten de manera dolosa los datos significativos de un contenido. Damos seguimiento a las noticias relevantes, aun en otros medios, mientras sean trascendentales para la comunidad. Los editores cuidan que los titulares se ajusten al contenido de los artículos respectivos y presentan los contenidos de manera objetiva, precisa y clara. En caso que tengamos que guardar el nombre de una fuente, para evitar poner en riesgo su seguridad, o porque así haya sido acordado, el compromiso de confidencialidad es total.